Un equipo que sigue creciendo y que gana enteros de cara al March Madness es ARIZONA. Lleva una temporada sobresaliente cuando no se contaba con pasar del bien. Ayer se jugaba el liderato con WASHINGTON STATE en casa y volvieron a dar el do de pecho. Uno de los factores fundamentales de que los Wildcats estén donde están es su estrella Derrick Williams (foto) al que se le asigna como futuro número uno del draft de la NBA para la próxima temporada. Un 4 con un físico portentoso, grandísimo defensor e intimidador, entra al rebote ofensivo con una fuerza descomunal, y con una calidad ofensiva que abarca juego de espaldas al aro, de cara, a media distancia, e incluso una gran mano para el tiro de tres. En definitiva un jugador muy inteligente y completo y que este año, en un, simplemente, buen equipo, esta demostrando su valía y haciendo rendir al grupo por encima de lo esperado. Anoche tenía enfrente a uno de los jugones de la liga, Klay Thompson, uno de los máximos anotadores del pais, y con una facilidad para crearse sus propias canastas fuera de lo común. El partido fue controlado de principio a fin por los locales y acabaron ganando por 70-79, y el duelo de pistoleros no defraudo porque ambos jugadores de los que hablabamos antes fueron con diferencia los más destacados de sus equipos: por un lado Williams terminó con 26 puntos, y con unos magníficos porcentajes de 7/10 en tiros de campo y 12/12 en tiros libres ademas de 8 rebotes, 2 asistencias y un tapón. Sin embargo, Thompson, a pesar de terminar con más puntos, 30, necesitó muchas más balas que su rival ya que sus porcentajes no fueron tan buenos y necesitó tirar 24 veces a canasta para conseguir 11 canastas y 3/4 en tiros libres, así como 5 perdidas de balón. Los de Tucson mantiene su liderato en la Pac 10 y los Cougars se quedan cuartos aunque aún les restan para terminar la temporada 5 y 4 partidos respectivamente.
Aún así, gran partido para ver en acción a 2 de los mejores jugadores de la NCAA, con buen baloncesto y mucho espectáculo.