El Lobe Huesca lo tuvo en su mano pero lo dejó escapar, como se le han ido varios partidos esta temporada, asíque todo dependerá del partido de la semana que viene en el Barris Nord de Lleida, que como La Palma no se jugará nada.
El partido comenzó con la sorpresa de ver saltar en el quinteto inicial a Sergio Llorente, el hijo de José Luis, que para sorpresa generalizada (apenas contaba con minutos últimamente) lo hizo muy bien. El acierto peñista desde la línea de tres le hacia coger ventajas de 5-6 puntos, pero como ya lleva ocurriendo desde hace mucho tiempo, la mala defensa impedía abrir brecha en el marcador.

La afición que acudió en masa a la llamada del equipo, no solo se estaba pendiente del partido, ya que por megafonía anunciaban que el Murcia estaba barriendo al Adepal Alcazar, pero que Palencia le plantaba cara al Breogán. Entonces fue cuando los locales apretaron y consiguieron irse al descanso con una renta de nueve puntos. Pero un tercer cuarto en el que el desconcierto reino en el ataque peñista (con un desastroso Xavi Ventura) volvió a meter a los canarios en el partido, ya que los oscenses no lograban imponer su mayor altura en algunos duelos. Entonces tuvo que ser Stevie Johnson el que cogiese el mando del partido haciendo todo el trabajo para un equipo que dependía de si mismo para salvarse en ese momento, porque llegaban noticias desde Lugo de que los locales ya se habían despegado. Al final se llegó con una minima ventaja en el marcador, pero en la suerte de los tiros libres ni Bond, ni Johnson (que jugó prácticamente todo el partido) estuvieron atinados, y un ex-peñista como Dani Rodríguez sí para lograr forzar una prorroga a falta de 0.4 segundos.

En el tiempo extra los triples visitantes mataron a los de casa que ya estaban con la reserva en el depósito. Al final todo se queda como estaba para la última jornada, con la diferencia de tener que jugarse la vida fuera de casa, aunque se prevé que haya éxodo verde hacia una ciudad a apenas hora y media, pero la sensación de oportunidad de oro desperdiciada rondara para siempre.