En una Liga revuelta, el equipo que visitó hoy el pabellón de la Font de Sant Lluís de Valencia, Lagun Aron GBC es una de la revelaciones de la misma. Disputa el título de Revelación a Lucentum o Fuenlabrada pero hoy no ha ofrecido su mejor versión. Un equipo que anota más de 78 puntos por partido se ha quedado hoy en Valencia en 60 puntos, quizás por la intensidad defensiva que puso el equipo de Perasovic durante el partido, que ve la luz al final del pasillo del hospital al ver cómo la lista de bajas mengua y recupera jugadores a su plantilla. 

Con una afición que da visos de alejarse del equipo, las primeras jugadas dieron paso a los primeros gritos de reproche a los jugadores locales. Víctor Claver acostumbra a ser el primer destinatario de las críticas de la afición, aunque hoy Nik Caner-Medley se ha unido a los reproches de los aficionados a pocos minutos del comienzo. Y es que empezaron fríos ambos equipos, tanto al València Bàsket (VBC) como a Lagun Aro GBC les costó unos minutos encontrar el ritmo al partido. Vítor Faverani inauguró el marcador con un mate de una belleza plástica extraordinaria. Javi Salgado, por parte de GBC daba la réplica en la anotación y destacaba en su equipo mientas que en Valencia la anotación era más repartida. Lagun Aro tomó su primera ventaja (14-16) tras un robo de Raulzinho Neto a Rafa Martínez. Seis puntos seguidos de Nando de Colo devolvieron la ventaja al Valencia Basket que no consiguió llevarse el primer cuarto (20-21).

 Tras unos desajustes defensivos, en el segundo cuarto, volvieron los reproches contra los jugadores locales que, sin embargo, consiguieron anular la efectividad anotadora de los hombres de Sito Alonso. Faverani, de nuevo único pivot nato en la plantilla local, anotó 6 de los 8 puntos locales en este periodo. Andy Betts 28-30 al descanso.

Tras el descanso, el partido siguió igualado, aunque sendos triples de Rafa Martínez mantuvieron al VBC por delante en el marcador pero la mala dirección valenciana fue aprovechada por Lagun Aro para tomar una ligera ventaja (41-47) y a Velimir Perasovie a cortar esa racha visitante. Cuando Claver juega incisivo hacia canasta es mucho más productivo que apostado en el exterior esperando lanzar un triple en el que no siempre es efectivo. Esto lo hizo a raíz del tiempo muerto de Perasovic.

 El tercer cuarto terminó 48-48. Stefan Markovic es uno de los (casi) recuperados de la lista de bajas. Tras un inicio de partido discreto, su dirección en los dos últimos periodos ha mostrado que otro tipo de juego es posible. No solo los arreones de De Colo o la lucha sólo-contra-el-mundo de Caner Medley. Mover la pelota con criterio, dentro-fuera, buscar al jugador con mejor posición, rapidez, clarividencia en el juego. Cualidades que hacía tanto tiempo que no se veían por Valencia. Si además, Markovic cuenta con la colaboración de un impresionante Pietrus, que se cargó de faltas en los primeros minutos que jugó, pero que aguantó casi todo el segundo periodo hasta que fue eliminado por faltas. Florent Pietrus fue un fortin en defensa e hizo honor a su apodo de pantera lanzándose como un felino a por cualquier balón suelto cerca del aro. No es la primera ovación que recibe Pietrus este año en la Font de Sant Lluis pero la de hoy era justamente merecida pues fue junto con Markovic los determinantes de un partido que hasta el minuto final estuvo muy igualado.

 La victoria valencia (69-60) no es fiel reflejo del discurrir del partido, que Lagun Aro tuvo muy controlado y pudo haberse llevado si el acierto cuando se puso por delante hubiese sido mayor dando lugar al nerviosismo local. No fue así y con la gran dirección de Markovic, Nando de Colo como estilete y la garra de Pietrus el València Bàsket se llevó la victoria. Destacar a un soberbio Sergi Vidal que hizo de todo, y todo bien, alcanzando 25 puntos de valoración. Lástima que sus compañeros estuviesen a menor nivel.