El Real Madrid se ha hecho con el primer título oficial de la temporada de baloncesto en España después de derrotar al Barcelona Regal en la final de la Supercopa ACB que se celebraba en Zaragoza. El conjunto de Pablo Laso ganó por 84-95 ganando por primera vez este título y rompiendo la racha triunfal del Barça en esta competición en la que había triunfado en las tres últimas temporadas. En líneas generales el Real Madrid fue mejor con un equipo más sólido a esta altura de la temporada en buena medida porque su forma de juego no ha cambiado y los jugadores son prácticamente los mismos. Los de Laso tuvieron algunos altibajos pero de la mano de Rudy Fernández siempre llevaron el mando del marcador ante un Barça que echó de menos a Navarro y Jasikevicius y que todavía tiene que ajustar las novedades en su plantilla entre las que destacó Jawai (20 puntos), una potencia física que muchos están conociendo ahora y que va a dar mucho que hablar.

Real Madrid y Regal Barcelona comenzaron el partido explotando algunas de sus virtudes de esta temporada. Los azulgranas, que tenían la ausencia de dos de sus mejores hombres exteriores, explotaron el juego interior con Lorbek y Tomic que precisamente ha dejado un hueco importante en la zona del conjunto blanco que parece que anda detrás de un pivot que añada centímetros a su pintura. El croata empezó bien pero como le solía ocurrir en el Madrid, se fue diluyendo con el paso de los minutos. Por su parte, el Real Madrid se animó a correr y a aprovechar el tiro exterior para llevar el ritmo del marcador en el primer cuarto.

Y es que los tiradores madridistas estuvieron muy acertados desde el principio cuando Rudy y Llull avisaban con tres triples en sus tres primeros intentos. El acierto exterior blanco continuó y llegaron a hacer 6 de 7 en el primer cuarto. Aunque Lorbek y Tomic castigaron a Mirotic y Slaughter en la pintura, ese acierto exterior permitió al Madrid tener las primeras ventajas en el marcador que era de 23-30 al final del primer cuarto gracias a los triples de Carroll (17 puntos en 17 minutos) y Reyes.

Encajar 30 puntos en un cuarto era demasiado para un Barça que tiene en la defensa una de sus virtudes. Los de Xavi Pascual ajustaron líneas en defensa y aunque el acierto exterior blanco disminuyó las canastas de Rudy y un mate de Begic tras asistencia de Sergio elevaron a 11 su diferencia (30-41) obligando al Barça a pedir tiempo muerto. Las órdenes de Xavi Pascual hicieron efecto porque de ahí hasta el descanso el Barça fue superior y Ingles (10 puntos al descanso), Rabaseda y Jawai pusieron el 43-44 antes del paso por vestuarios.

El bajón de juego que sufrió el Madrid en el segundo cuarto pareció resuelto en la reanudación. Aunque el Barça llegó a poner el empate a 46, el Madrid volvió a correr y aprovechó el desacierto de Ingles en ataque para conseguir un parcial de 0-10 con el que se escapaba de nuevo en el marcador. Al Barça le tocaba remar de nuevo a contracorriente pero tiene calidad de sobra para hacerlo y no le costó demasiado volver al partido gracias a un par de triples de Lorbek y Rabaseda y el trabajo interior de Jawai. Sin embargo, en el final del cuarto las canastas de Carroll y Rudy que se iba ya a los 16 puntos estiraba de nuevo el marcador (56-65).

El Barça necesitaba una reacción pero no se veía por donde podía llegar. Además, sus imprecisiones le condenaron en los primeros minutos del último cuarto en los que las canastas de Mirotic y los triples de Carroll y Rudy, dos en la misma jugada, elevaron la diferencia hasta los 19 puntos dejando el partido prácticamente sentenciado. Aunque el Barça intentó reducir diferencias con un parcial 8-0 liderado por Lorbek y Mickeal, el Madrid no quería dejar escapar el título y jugó con cabeza en los últimos minutos para que Felipe Reyes levantara por primera vez este título que faltaba en las vitrinas blancas.