España resolvió un compromiso vital para sus aspiraciones en las eliminatorias de cuartos de final ante Canadá (85-57) y, salvo el tropiezo contra Argentina en la segunda jornada, luego rectificado contra pronóstico frente a Brasil, está cumpliendo el plan que tenía previsto seguir. La selección de Domingo Díaz desbancó al cuadro canadiense a partir del descanso. Desató la oleada buena en los prolegómenos del intermedio liderada por una excelente Amaya Valdemoro (veintiocho puntos; diecinueve en el primer tiempo) y construyó un triunfo inapelable en la segunda parte.
Ahora espera el último choque de la liga de octavos de final, contra Lituania (lunes; 18.00 hora española), con posibilidades de adjudicarse la segunda plaza del Grupo E por detrás de la invicta Australia. Esa posición le abriría muchas opciones en la eliminatoria de cuartos, ya que se enfrentaría al tercer clasificado del Grupo D.