Se esperaba con expectación el partido ante Santurtzi por tratarse de un duelo equilibrado, entre dos equipos con objetivos similares, y por ver la capacidad de reacción de los hombres de Alfredo Riera tras sumar dos derrotas consecutivas. En el inicio se mantuvieron las esperanzas de retornar a las victorias, pero se quedó en nada. Al final, los de Santurtzi se llevaron la victoria en la pista y hasta la cesta de Navidad que el Oviedo sortea en el descanso voló al País Vasco en manos de un aficionado. Vaya día.

El Oviedo comenzó mandando en el primer cuarto, con su tripleta de americanos llevando al equipo. Suyos fueron prácticamente todos los puntos que hizo el equipo carbayón en los primeros diez minutos. Se defendía con orden y se acertaba en el ataque, pero Santurtzi hacía la goma y no dejaba en ningún momento a los locales despegarse. La sensación en el juego era claramente favorable a los locales, pero de poco sirven las sensaciones si el marcador registra más igualdad de la que parece haber. Al final del primer cuarto, la ventaja para el Oviedo era de cuatro puntos (26-22). La vuelta a la pista despertó a los vascos, que a los tres minutos de juego lograron conjugar la ventaja y pasaron a ponerse por delante. Una racha de 0-8 permitió a los de José Manuel Carrión ponerse cinco arriba (36-41), pero Alfredo Riera puso en pista a los pesos pesados y una canasta de Rubén Suárez dio inicio a la reacción oviedista, siempre con Ian O’Leary como destacado. Un alley upp entre Javi Román y el americano devolvía la igualdad al marcador para que los de Pumarín llegasen con una mínima ventaja al descanso (46-45).
El paso por vestuarios pareció sentar bien al Feve, especialmente a Kevin Ratzsch, autor de los primeros ocho puntos de los locales. Pero no hubo continuidad. Mediado el cuarto, el Feve se iba seis arriba, pero Santurtzi no perdió ritmo y volvió a recuperar el acierto y la intensidad defensiva, poniéndose por delante a cuatro minutos para el fin del periodo e incrementando su ventaja hasta llegar a los cinco de diferencia (63-68) en el minuto 30.
El inicio del último cuarto no daba buenas sensaciones y el Santurtzi se llegó a poner a ocho. La ansiedad hizo acto de presencia en el cuadro carbayón y llegó la precipitación. Las ideas se espesaron y el partido se fue de las manos. A 2.04, la distancia se agrandaba hasta diez puntos (73-83) y el equipo no daba sensación de reaccionar, a pesar de intentarlo con presión en toda la pista. En los dos que quedaban había que intentarlo como fuese, pero fue imposible y el Feve volvió a encajar demasiados puntos, 91, lo que deja claro que la eficacia defensiva del inicio de la temporada se ha diluido y es necesario recuperar esa consistencia.

Santurtzi (91): Marcos Casado (15), Dennis Read (17), Unai Calbarro (2), Tomas Hampl (10), David Reichel(12) –cinco inicial-, Renan Michel (24), Sergio Sánchez (6) y Eduardo Hernández (5).

Parciales: 26-22; 20-23 (46-45); 19-23 (63-68); 16-23 (79-91).

Árbitros: David Manuel Guillán Riveiro y Sergio Manuel Rodríguez. Excluido Hampl por cinco personales.

Incidencias: tres cuartos de entrada en el polideportivo de Pumarín.

Departamento de Comunicación Oviedo Baloncesto