Increíble lo vivido en Andorra: ambiente, partido... Los aficionados se dieron cita para presenciar un partido que se rompió en la segunda mitad y que le da la reserva de billete a Lucentum (ahora queda pagarlo). Tras el salto incial, Alicante salía bien enchufado y aprovechó para distanciarse antes de empezar a errar tiros. El primer parcial acabó 15-21. El segundo cuarto fue el más interesante de todos: Andorra acercándose bastante y un bonito intercambio de triples, aunque el resultado fue que Alicante obtuvo más rentas sobre el equipo del principado (42-53). La segunda mitad no tuvo mucha historia: Fernández expulsado por dos antideportivas y Rejón también tuvo una de estas faltas en su casillero. Alicante rompió el partido nada más salir a pista. Un tiempo muerto de Peñarroya con la intención de despertar a sus jugadores ("sois muy grandes, no tiréis todo ahora. ¿Vamos a dar esta imagen en el último partido? Hemos llegado hasta aquí y lo vamos a conseguir") no tuvo el efecto esperado en los jugadores, porque el conjunto visitante llegó hasta los 34 puntos de diferencia. Al final, como es obvio, solo tuvo que administrar bien aquella enorme ventaja para obtener el ascenso y cerrar el telón deportivo de una temporada loca que se salda con el descenso deportivo del decano Melilla Baloncesto y de Ourense mientras que los afortunados que obtienen el derecho a plaza ACB son Ford Burgos y Lucentum Alicante.